miércoles, 30 de noviembre de 2011

Tololo 81

hoy 30 de noviembre, es el cumpleaños de nuestro querido y recordado Papá Vittorio Badoino Acervo. Lo tendremos presente acordandonos que adoraba reunir a sus hijos, esposa, nueras, tios, primos y amigos en estas fechas de gran camaderia,compartiendo los potajes de su tierra querida Moquegua. (GBR)
30 de Noviembre cumpleaños de viejo..el gran Vittorio Badoino Acervo, una de sus canciones favoritas y su grupo fiel en sus fiestas de cumpleaños....Ahora jaraneando con mi Mami Piedad, mis tios Juan y Enio, mi adorada mamita Virgilia....Feliz dia Tata ABR
Recordando un 30 de noviembre al querido tío Tololo, cómo olvidar las lindas fiestas de cumpleaños en Toquepala con deliciosa comida preparada por sus manos.. Inolvidables sus Camarones al Ajo y su deliciosa Fugaza! Besos hasta el cielo para ti y todos los nuestros. Mis oraciones están contigo siempre. EVR

Tote Badoino Rivera
30nov.2022

SEÑOR DE SEÑORES en SOUTHERN PERU COPPER CORPORATION honesto en su actuar por esos lares , bondadoso y sincero con el amigo y paisanos de Moqueguita ( su tierra que adoro a estima ajena),,a quienes no dudo en apoyarlos con trabajo ,a veces drástico y duro en su trato en la chamba,,pero así eran las cosas, por la presión exigida por los altos mandos,,rendimiento y produccion , tu lidiaste con eso y llegaste a ser impresindible en las altas reuniones de gerencia
STAFF MEETING GERENCIAL de las TRES AREAS
Ahora pue' día de tu CUMPLEAÑOS ,añoro esos momentos vividos contigo, con mis hijos a cuales engreíste mucho x el apoyo a yayita en mis tiempos vividos en el barrio botiflaca - cuajone
HOY DIA 30 DE NOVIEMBRE es DIA de FIESTA GRANDE,, en tu hermoso HOGAR de VILLA CUAJONE ,,al lado de tu adorada PIEDAD,, calle arequipa number 114,,entre grandes amigos, entre grandes jefes spcc,entre reyes y reynas , hermanos a tío juancito maldonado a tio churrucas y sus cocteles de tumbo felices ,, TODOS ,,, discurría el humo con sabor a chanchito al horno que embriagaba el ambiente, en la cocina la pla' con sus rocotos rellenos y lasaña pero de esas,,
Y torta pal cumpleañero , pero esa de casa hecha por mi sra madre ,, que te digo : GOOD' especialista la MAMMA,,
NO ESTAREMOS PRESENTES DON VITTO' PERO SI ' NAIDIES NOS QUITA LO VIVIDO' así como me lo dijiste, alguna vez FELIZ CUMPLE DON VITTO

lunes, 1 de agosto de 2011

Salvados por la tinaja (Deshojando la vida del campo)

Por: Piedad Rivera de Badoino

La naturaleza sabia y generosa de todos los tiempos, alimenta remembranzas que no podré olvidar, porque calaron hondo en mi infancia inocente que me hiciera muy feliz.

Un cielo siempre azul, con rutilantes estrellas que encantadas giran a la luz de la luna y escondida por el sol acariciante que jamás dejó de brillar y reinar en ésta, mi Moquegua idolatrada.


Recuerdo esos árboles silvestres y frutales dueños de su destino, protectores cariñosos de esa “chacrita” dulce y soñadora que era mi hogar…añoro mi casita que en medio de flores y verduras eran un Edén y hoy como relucientes tambores retumban en mi soledad y a través de ellos ansío el recuerdo de esa imagen querida que algún día se fue.

En un amanecer de un día cualquiera, pasan lindas nubes de curiosas formas…los montes cercanos despliegan su verdor con la primera luz… el aire se torna con un vaho húmedo y caliente, y de la tierra brota un sabor dulzón …las aves y pájaros un poco alterados y juguetones por nuestro madrugador paso…y el ruido del agua que cantarinamente discurre por las nativas acequias subyuga y estremece.



Parece que este moderno siglo de grandes avances, alguna ausencia inmensa sacude aquello que hoy es remembranza y que es sustento de un pasado glorioso pero presente en un futuro halagador.

Que admirable sabiduría poseían nuestros antiguos chacareros, hoy agricultores; pues en sus haciendas y chacras con huertos matizados con toda clase de frutales, cuidados con esmero y dispuestos en un sorprendente orden, para no descuidar que sus frutos sean cosechados cuando nuestro organismo los necesitaba…no era ni la técnica ni la ciencia, era ese inmenso amor por sus tierras y ella devolvía con creces su verdadero premio a la vida, a la salud, al bienestar…

Como no añorar la existencia de gallineros que albergaban a finas gallinas ponedoras de finas razas traídas del extranjero y cuidadas esmeradamente…toda una gama de aves que eran un encanto a los ojos y al corazón (crianza por un tío especialista).

Extrañar las vacaciones de antaño, que en noviembre ya se avizoraban, porque los grandes y frondosos “Moros” repletos de azabaches frutos, eran nuestra delicia y deleite que cautivaban e incentivaban a inventadas jugarretas (sacudidas, subidas al árbol y golpes).

Y en uso de merecidas vacaciones escolares, se tornaban las higueras con repletos frutos (higos) y llegado el 8 de diciembre saborear las escondidas “brevas”. Mi padre nos premiaba para ir toda la familia y a la luz de la luna recoger los higos maduritos blancos y rojos colgados en sus ramas y en la “bajerita”, así como también muy de madrugada recolectar las tunas blancas, porque con el sol nos “saltaban los quepos”.

Mi pluma no se detendría en narrar, pero dejo la evocación de verdaderos moqueguanos soñar y recordar nuestra Benemérita Ciudad de antaño.

La naturaleza muchas veces nos premia, pero otras también nos castiga: terremotos, inundaciones, abundantes lluvias, aluviones, que causaron daños y zozobras, crecidas de los ríos y entradas de todas las quebradas colindantes. Este es el caso que me anima a denominar este relato: “Salvados por la tinaja”.

Nuestros indígenas, grandes conocedores y expertos artesanos, usaron pequeñas vasijas para recepcionar el agua; al llegar los españoles, éstas no les bastaban para almacenar líquidos (agua, vino, aceite), obligando a los nativos a señalarles los “lugares donde extraían la arcilla que mezclada con barro gredoso y agua, les proporcionaba una pasta que se colocaba en el molde del tinajón, para una vez seco, fueran sometidos a cocción en hornos especiales que fueron levantando en diferentes haciendas, donde los hispanos se afincaron”(datos de + L.E. Kuon Cabello).

El valle de Moquegua quedo inundado por estos tinajones desde 1540 y en 1587 con el inicio de producción de vinos y aguardientes, fueron usadas en todas las bodegas y haciendas, enterradas hasta el cuello. Gran tristeza me embarga por la suerte de estos ceramios: unas fueron destruidas por los constantes terremotos y otras saqueadas y enviadas a diferentes partes del país. Sin embargo ello no privó de seguir usando las tinajitas para hacer madurar la chicha de jora, que hasta hoy se utiliza en algunos lugares, junto con las destiladeras de piedra artesanales para purificar el agua y conservarla bien helada.

En mi hermosa chacra “La Orapía”, teníamos una grande y hermosa tinaja que servía para el almacenamiento de granos (maíz ó trigo) y a pesar de mi corta edad (8 ó 9 años) marcó una gran vivencia el guarnecernos en una tinaja mi madre, mis tres hermanas (una de pecho) y Yo. Mi querido padre Mariano Rivera Zeballos, gran agricultor por excelencia, acompañado de su fiel peón, tuvo la brillante idea de usar esta tinaja para salvar a la familia de ese gran diluvio, colocaron la mesa del comedor en el cuello de la vasija que sirvió como resguardo. Acondicionaron colchones y frazadas y una a una nos fueron instalando. Allí permanecimos hasta terminar la noche y esperar el cese de la tormentosa lluvia cobijados en esta salvadora tinaja.

¿No es acaso hermoso tener padres amorosos que lo dan todo por sus hijos?

Y concluyo este familiar relato recordando a “Mateo Cap. 7-24-26: “Vino la lluvia, crecieron los ríos y soplaron los vientos…. Pero la casa no se cayó…. Porque estaba cimentada sobre una roca…”

Noviembre 20 del 2009.

sábado, 7 de mayo de 2011

¡Amor de madre!

Por: Piedad Rivera de Badoino

(A todas las madres de Perú y el mundo)

Para escribir o hablar sobre el amor maternal, no tendríamos espacio ni tiempo. Hombres y mujeres de todas las edades lo han hecho de diversos modos y en todos los idiomas y desde niños hemos aprendido que no existe nada más hermoso que una madre. Por su amor nos volvemos artistas, pintores poetas…nos sobrarían los adjetivos más bellos para describirla y emplearíamos las frases más sentidas.

El amor de madre es tan intenso que subsiste a pesar de días estables o inestables, a pesar de riqueza o miseria, a pesar de vivir una verdad o caer en la mentira; su amor es indispensable y se fortalece cada vez más cuando se nos viene encima los días de rutina, de monotonía, de desasosiego, de intolerancia.

El amor de madre es ese amor sin dobleces, ni mentiras… es ese amor que todo lo puede, todo lo da, todo lo allana y esta en todos nuestros instantes.

Cuando empezamos a crecer como las olas, miramos por sus ojos… caminamos con sus pasos, nos abrigamos con su calor, aprendemos a apretarla entre los brazos, quisiéramos que jamás se fuera de nuestros lado, tratando de detener indefectiblemente el tiempo.

Su amor es todo, porque no se le va del corazón, ni de la piel, ni del pensamiento y nos da a cada instante pruebas de su sacrificio y de su renunciamiento.

Si Jesús siendo Dios quiso ser también hijo y tener una madre como María y nos la regala a todos los mortales como una prueba de su amor, es un hecho sublime y divino, que nos habla del significado de madre, es por ello, que el mes de mayo debe ser recordado con especial devoción y admiración, porque es el mes de María.


Si bien es cierto que existe un día dedicado a homenajear y venerar a la madre…considero un deber que de algún modo, hagamos un alto en nuestro quehacer para estrujarnos el corazón, meditar sobre su significado y dedicarle lo mejor de nuestras vidas, pudiendo recordar un tanto en los versos de una poesía aprendida en el colegio: “ Si tienes una madre todavía. Da gracias al Señor que te ama tanto…que no todo mortal contar podría… dicha tan grande ni placer tan santo”.

¡Ensalcemos a la madre trabajadora del campo o de la ciudad…a la madre pobre, rica, o soltera, a la madre ama de casa, de oficina o maestra, a la madre anciana, a la madre ausente y a todas las madres…porque ellas son solo eso ¡MADRES!.

Mayo de 1996.

miércoles, 13 de abril de 2011

SOPA DE VIERNES MOQUEGUANA

Por: Piedad Rivera de Badoino

Ingredientes:
  • Pan de Torata
  • Bacalao
  • Machas secas
  • Camaron seco
  • Queso fresco
  • Leche
  • Huevo
  • Cebolla
  • Ajo
  • Aji colorado
  • Aji amarillo
  • Paico
  • Huatacay





Cortar el queso en tiras.

Cortar los huevos en tiras delgadas.
Cortar el pan en tiras, y dorarlo en el horno.
Empezar a armar en una fuente, primero el aderezo, luego el pan, luego el queso, huevo y hierbas, hasta completar la altura deseada.




Agregar la leche.
Honear.

jueves, 24 de marzo de 2011

EL PASADO, PRESENTE EN EL FUTURO DE MOQUEGUA

Recuerdos del ayer

Por: Piedad Rivera de Badoino.


Rescatar y recuperar nuestro legado del pasado es deber y es justicia. Adentrándonos en lo que fue Moquegua, es sentimiento y es emoción, porque ello es y será el patrimonio histórico y cultural que nos pertenece y nos engrandece.

Historiadores, cronistas, poetas y aficionados con sus inspiraciones de grandes moqueguanos, han perpetuado el pasado glorioso de esta tierra, que como invalorable tesoro heredado, es el complemento de lo tradicional con lo moderno. Ello nos permite centrarnos en el maravilloso ayer y revivir semblanzas, tradiciones y costumbres transmitidas, que le dan a Moquegua ese atractivo peculiar, relevando su identidad de su pueblo altivo, soberano con mucha historia.

Como no recordar a la añeja ciudad de calles angostas y empinadas, que al conjuro orquestado de escobas en manos femeninas, lucían siempre limpias y bellas, siendo el marco digno de casas con sus típicos mojinetes y casonas al estilo colonial, reliquias valiosas que guardaban la vida de seres con triunfos y glorias, como así de ilusiones y desvelos.

A pesar de infortunios y tragedias, en Moquegua “persisten las huellas del pasado” (atractivo slogan). ¿No es acaso meritorio sentirnos ricos con lo que aún contamos?. La gastronomía tradicional y muy propia, con gran preferencia nuestra y de visitantes: “la cacharrada”, “el cuy frito”, típicos exponentes, sabrosos e inigualables. La pastelería y dulcería que conservan el dulzor y prestancia de otrora: “el alfajor de Penco”, “los dulcecitos” con nombres amorosos, con reservadas recetas; “el pan de Torata” merece un espacio especial; antiguamente llegaba muy temprano desde la atractiva Torata, en “mansas burras” con “cerones”, esperados ansiosamente para los mañaneros desayunos. Hoy se elaboran también en Moquegua (artesanalmente) y quienes llegan a nuestra ciudad y al degustarlo, nos regalan sentidos elogios. A decir de Dean Valdivia era el mejor pan del mundo.
La Iglesia Santo Domingo (hoy Co-catedral), bellamente restaurada, y nuestra Patrona Espiritual “Santa Fortunata”, cuyos restos auténticos son la mayor gloria heredada.
Los licores de gran variedad, vinos, piscos y macerados elaborados con avanzada tecnología, producidos en recuperadas y modernas bodegas, nos hacen exclamar: “Que hemos ganado la batalla”. Su fama y exquisitez es ya conocida mundialmente.

El pasado esta presente en el futuro de Moquegua y en esta oportunidad quiero referirme a las Casonas, que desafiando al tiempo son mudos testigos de la opulencia que vivió Moquegua, ellas dieron fisonomía original y siempre despertaron admiración y respeto; hoy las pocas que aun quedan, esperan pacientemente atención de las autoridades y de sus propietarios o herederos, lamentablemente dada la inoperancia en que se las tiene, han dado lugar a romper despiadadamente su armonía y cercenarlas sin ningún criterio.

Sin embargo vale destacar la casa de los Chocano, ubicada en un ángulo de la Plaza Mayor, con hermosa fachada de piedra y un elegante portón; es una casa bellamente conservada y restaurada con inmensos sacrificios por la férrea constancia y moqueguanismo de su actual propietaria Sra. Teresa Delgado de Podestá, se le conoce como “La posada”, hoy es una verdadera joya de gran valor que causa la expectativa y admiración de propios y extraños.
Esta bella reliquia arquitectónica, es de un solo piso con patios alegres y floridos, con patillos en los corredores, con distribución de habitaciones alrededor del patio. Es probable que haya existido un oratorio y al fondo (hoy un pequeño jardín) la cocina, las caballerizas y el aposento de la servidumbre.

Para la Sra. Teresa nada ha sido fácil, y pacientemente con inmenso amor y gratitud por lo nuestro, sin ninguna ayuda, ha llenado y decorado todos los ambientes, convenientemente restaurados, con muebles, joyas y enseres de épocas pasadas, armoniosamente y bien ubicadas con recuerdos del ayer, a decir verdad es única y muy valiosa.

A los moqueguanos nos llena de orgullo contar con esta bella Casona y es ya el gran potencial turístico, al que las autoridades deben brindar merecido apoyo.
Sería un gran reto aspirar a que los habitantes de Moquegua, especialmente la juventud, conozcan todas las bondades que encierra nuestro pasado y junto a todas las autoridades trabajar para rescatar el Centro de la ciudad. Nuestra existencia lo necesita y nuestros corazones así lo reclaman.

Moquegua, octubre del 2006.

jueves, 24 de febrero de 2011

¡Salud Moquegua!

Por: Piedad Rivera de Badoino



Peruano es el Pisco
de indiscutible verdad
sus raíces son sureñas
de Pisco, bella ciudad.


Si Ica lo engrandece
Moquegua lo perenniza
en su valle de viñas
que cultivadas con esmero
engalanan sus bodegas
con variedad, aromas y sabores
puro, acholado, quebranta, Italia
de sutiles preferencias.


El Pisco bien moqueguano
estará siempre presente
en tertulias y alegres reuniones
hermanando voluntades
de amigos de hoy y de siempre.


Es loable y rescatable
la valía de productores moqueguanos
que con modernas técnicas y esmero
este preciado licor bendito
ya ganó un sitial de privilegio.


También sin número de tragos
exóticos, deseados, y agradables
con la capacidad y el talento
de jóvenes como Carlo
son verdaderos cultores de lo nuestro.


Sumándose al tradicional Pisco Sour
con sofisticadas nominaciones
destacan ya en varios eventos.


Las tunas, pomarrosas, tumbos,
papayitas, Frutillas y damascos
con la fragancia de diamelas y magnolias
danzaran voluptuosas y en coqueteo
con un “mozo” y elegante Biondi
también con la gama de piscos nuestros
convertidos hoy… en “tragos diferentes”.


Un maravilloso “Baul de la monja”
la alegre “Primavera moqueguana”
el “Moqueguazo” fortalecido y aguerrido
con un tricolor “Moquegua Linda”
y muchos otros más…
ganadores en sendas competencias.


Y así paisanos y amigos
tenemos sobradas razones
para un franco deleite
con una emocionada garganta
gritar a los cuatro vientos
¡Salud … por ti … mi Moquegua amada!

martes, 22 de febrero de 2011

Recordando los carnavales

Por: Piedad Rivera de Badoino


El carnaval es la fiesta que debe celebrarse durante tres días, antes del “miércoles de ceniza”, (actualmente todos los domingos del mes de febrero), domingo, lunes y martes de carnaval, constituyendo como un desahogo previo a las abstinencias y recogimiento de la Cuaresma.

Durante estas fiestas, el juego con agua, el uso de globos, polvos, pinturas, serpentinas y misturas, son su principal característica, como así las comparsas, los disfrazados con máscaras fingiendo las más alocadas personalidades (demonios y animales), carros alegóricos, farándulas estrepitosas, regocijos, bromas, chaseos y desenfrenos, forman su mayor incentivo, que han perdurado en el tiempo.

Históricamente Venecia, Roma, Milán y Paris son las ciudades que más suntuosidad y alarde han celebrado los días de carnaval. En Europa los carnavales de Niza son famosos y en América lo fueron: Buenos Aires y Montevideo, y hoy son todo un acontecimiento los Carnavales de Rio de Janeiro (Brasil) mundialmente famosos, muy celebrados y esperados.

En el Perú se celebran en todos los departamentos con singular peculiaridad de cada lugar, con despliegue de su rico folklore y llamativa vestimenta, resaltando los carnavales de Cajamarca.

En Moquegua antaño, los carnavales eran famosos y esperados con gran expectativa y preparación, pero con mucha delicadeza y gran derroche de alegría, festejados siempre los tres días juntamente antes del miércoles de ceniza; domingo, lunes y martes de carnaval, próximo domingo “El domingo de tentación” y al siguiente “El de la vieja”. No sin mencionar que antes de empezar las fiestas carnavalescas, se celebraba “El jueves de comadres” o “Jueves de compadres”, siendo un acontecimiento muy esperado por las “mocitas” de ese entonces, quienes ataviaban primorosamente a sus muñecas, colocadas en lindas cestitas, se salía a las calles y casas, a conseguir las madrinas y a los padrinos para el bautizo, recibiendo siempre un regalito o propina.


En el carnaval, una festividad arraigada en el pueblo, se organizaban grandes fiestas, tanto para adultos como para los niños en la plaza. En estas fiestas destacaban los disfraces preparados con anticipación, destacándose lo de Colombia y Pierrot como los Dominó, con su respectivo antifaz. En estas fiestas el uso de “chisguetes de éter perfumados”, las serpentinas grabadas con atrevidos mensaje, misturas y polvos, hacían más bullicios estos carnavales.

Mención especial merece la preparación de los polvos que eran muy finos, elaborados con suave almidón y perfumados con la “Citronela” para que tengan un grato aroma.

Los bailes de carnaval tenían cierto rango, los más comunes y concurridos eran los de la “Sociedad de Artesanos” o los de “La filarmónica”, con asistencia de la Reyna de Carnaval y gran derroche de vistosos disfraces. Los de “La alta sociedad” eran en el Club Moquegua, con vestimenta de gala.

La elección de la Reyna de Carnaval era un acontecimiento muy importante y reñido, y se hacían entre las damitas mas bonitas, adornadas con ciertas cualidades. Muchas damas moqueguanas muy importantes, lucieron este cetro.

Destacaremos también la celebración de los carnavales de las chacras y haciendas con notoria asistencia de los pobladores de la ciudad (invitados). El dueño de la casa se preparaba grandiosamente. La mesa de comedor, muy adornada con mantel blanco, dos floreros con margaritas y magnolias, y en el centro una licorera de coñac y vasitos, para el aperitivo, antes del suculento almuerzo; y posteriormente el humeante asado de cordero y chancho, bien mojado con el sabroso vino.

Moquegua siempre se ha caracterizado porque en cada celebración se presente un potaje típico, es así que en el carnaval era infaltable el “Puchero” o “Sancochado” con diferentes carnes, llevando también frutas como el durazno y el membrillo; y como postre no podía faltar la hojaldrilla rellena con dulce de membrillo, llamada también “Empanada de Carnaval”.

El calor reinante y los aperitivos invitaban al juego con agua y generalmente se terminaba en las acequias y pozos, para el jolgorio general por los incautos que caían en el juego. Durante el almuerzo los polvos, misturas, serpentinas y muchas veces la sandia y el melón, daban un gran toque carnavalesco.

En la ciudad las famosas “Pandillas” de muchachos disfrazados y pintarrajeados, causaban gran temor y muchas veces terminaban sumergiendo a las damas en la pileta de la Plaza o algún “Pilón” cercano.

Por la tarde de uno de los días se llevaba acabo el Desfile o Corso con la Reyna y el Rey feo (hoy “Momo”) acompañados de danzarines ataviados con gran colorido. “El Rey feo” hacía mas alegre el desfile con sus bromas y posturas especiales. Por la noche los tradicionales bailes con disfraces muy selectos preparados anticipadamente, abundantes: serpentinas, misturas y atrevidos chisguetes de éter que ponían en alerta a las damitas, existiendo un derroche de contagiante algarabía.

Es así como el carnaval era expresión de alegría y libertad, con el entierro de “Ño Carnavalon” que dejando un jocoso testamento, desaparecía tristemente, concluyendo así estas fiestas, para sumergirnos piadosamente en la celebración de la Cuaresma y con sincera devoción solicitar el perdón, por el tal vez desenfreno de los carnavales, quedando en el recuerdo alguna copla que se canturriaba durante el desarrollo de estas fiestas:

¡Ay Carnavales… Toma Carnavales!

Estos Carnavales

Quien inventaría

Un mocito loco

Como tu seria

¡Ay Carnavales… Toma Carnavales!

Con esta cintita

Yo te envolvería

Y juntos bailaremos

Hasta terminar el dia

¡Ay Carnavales… Toma Carnavales!

Estos Carnavales

No se pasan tristes

Viene la Cuaresma

Luego los enviste

¡Ay Carnavales… Toma Carnavales!

Moquegua, febrero del 2003.

jueves, 3 de febrero de 2011

Mery le canta a Piedad



Hoy He Vuelto

Cuantas Veces Siendo Nino Te Rece
Con Mis Besos Te Decia Que Te Amaba
Poco Poco Con El Tiempo Fui Olvidando Me De Ti
Por Caminos Que Se Alejan Me Perdi (2)

Hoy He Vuelto Madre A Recordar Cuantas Cosas
Dije Ante Tu Altar Y Almirate Puedo Comprender
Que Una Madre No Se Cansa De Esperar

Al Regreso Me Encendias Una Luz
Sonriendo Desde Lejos Me Esperabas
Con La Mesa La Comida Ahun Caliente Y El Mantel
Y Tu Abrazo Es Mi Alegria De Volver (2)

Hoy He Vuelto Madre A Recordar......

Ahunque El Hijo Se Alejara Del Hogar
Una Madre Siempre Espera Su Regreso
El Regalo Mas Hermoso Que A Los Hijos Da El Senor
Es Su Madre Y El Milagro De Su Amor (2)

Hoy He Vuelto Madre A Recordar........

miércoles, 12 de enero de 2011

Perfiles de Moquegua

Por: Piedad Rivera de Badoino


Moquegua es uno de los departamentos del Perú más olvidados, pudiendo aplicarse lo que un poeta escribió de su patria: “Es una flor encantada, pero es una flor que llora, como si estuviera colgada en el abismo”.

Y al decir que Moquegua es también una flor que llora, no estamos lejos de la verdad, porque esta tierra de espléndidas riquezas naturales, de clima bondadoso y cielo azul radiante, con un paisaje de una grandiosidad inenarrable, aún muestra su alma dolorida. Es flor de pétalos marcados por sus luchas de conquista y libertad!; heridas sangrantes que brotan del olvido y de la indiferencia.

La llaman “la ciudad dormida” y lo es, porque en ella el tiempo parece detenerse donde la paz y la tranquilidad existe por doquier; es Moquegua cuál dulce y apacible manantial que invita al reposo…, pero no es ciudad dormida porque esté eternamente descansando, o dormida en un letargo soñoliento …no, no es eso, ya que por que por las venas de sus hijos hay inquietudes de estudio y trabajo, de esfuerzo y tesón, pronto a darse por entero a la lucha y al sacrificio.

Moquegua cuenta con un pasado glorioso en la memoria de sus fundadores, en los que levantaron las primeras casas y edificaron templos y colegios, en los hombres humildes que apretando el arado, abrieron los primeros surcos… en sus héroes que como Nieto y Urquieta, son símbolo elocuente de nuestra estirpe de patriotas… en sus hombres y mujeres notables de ayer y hoy que le dan prez y gloria…en sus cerros “Belén y Portillo”, mudos testigos de rivalidades y jugarretas infantiles.

Moquegua esta también en sus típicas jaranas… en el trinar de sus guitarras que rompen la quietud de la noche con sus serenatas!.

Moquegua es cada trozo de tierra trabajada por las callosas manos de sus labradores donde sus trigales de doradas espigas, sus vides, olivos y algodoneros, sus generosos frutales , son delicia y son sustento, junto con sus vinos y aguardientes, tradicionalmente famosos por su calidad y pureza.

Moquegua esta en sus casonas antiguas de estilo colonial, en las de hoy, de peculiar fisonomía en corte irregular de sus calles, que con sus plazas y alamedas, contrastan con la uniformidad de otras ciudades… en el candor de sus mujeres hermosas y buenas para hacer los “alfajores de penco” y el “manjarblanco”.

Moquegua está en los que al tañir de sus campanas acuden a sus rezos y procesiones religiosas, confundidos con el bullicio de cohetes y castillos para venerar a sus santos o celebrar fiestas jubilares… en las preces y plegarias que ofrenda cada 14 de octubre a su Santa y Mártir “Santa Fortunata”.

Así es Moquegua… tierra promisoria en su fé inquebrantable de progreso, por el esfuerzo de sus hijos.

Toquepala, noviembre de 1960